2ºCORINTIOS 4: 17 Porque nuestra tribulación, que al presente es momentáneo y leve, nos obra en sobremanera un alto y eterno peso de gloria;

 

Volviendo la mirada al inicio de los tiempos del hombre, cuando Adán y Eva cometen pecado por la desobediencia, DIOS le dice a Adán: 

 

GÉNESIS 3: 17  Y al hombre dijo: Por cuanto escuchaste la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él. Maldita será la tierra por amor de ti; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida;

 

Se aplica un castigo correctivo por la desobediencia al padre, en ese punto el hombre estaba en el edén bajo la protección y enseñanza de DIOS, hoy está en la tierra, solo con su vanidad, moldeándose a sí mismo; bajo la mirada atenta del padre pero no con la guía de su mano, sino la de su palabra y su voluntad,corregir sus errores por medio del espíritu santo.

 

 Este ejemplo se puede reflejar en la educación de una criatura inocente que absorbe todo lo que los padres le enseñan; con un adolecente que escucha pero quiere experimentar por si mismo dejando la inocencia de lado y reemplazándola con la imprudencia.

 

Visualicemos una meta, que es DIOS, hacia allí nos dirigimos, pero este es un camino recto lleno de obstáculos, para avanzar debemos ir limpiando ese camino, sacando a un lado los obstáculos que impiden nuestro avance, pero muy importante es saber que el camino hacia DIOS es recto y en una sola dirección; cuando una persona comienza a transitar este camino LCF, que es el gran simulador de verdades, pues las conoce bien por haber estado junto a DIOS desde los comienzos, va a intentar distraernos de nuestro propósito, desviar nuestra atención de DIOS, ofreciéndonos alternativas muy convincentes, atajos que aparentemente nos llevan a nuestro destino, pero estos atajos sirven solo a su propósito y no al nuestro, por lo tanto si queremos avanzar debemos despejar ese camino, ¿cómo? Haciendo una limpieza espiritual, lograremos una madurez que forjara en nosotros carácter, virtudes, voluntad, esas son nuestras fortalezas que nos permitirán continuar hacia lo prometido.

 

Todos los obstáculos o dificultades en la vida se han generado a causa nuestra, por tanto somos responsables de esto y debemos dar solución con la ayuda de DIOS, no sirve de mucho cubrir la herida sino la sanamos. Debemos buscar en la dirección correcta para alcanzar nuestro propósito, entregándonos al padre sabiendo que lo que ha de suceder será para bien.

 

ROMANOS 8: 28 Y ya sabemos que a los que a Dios aman, todas las cosas les ayudan a bien, a los que conforme al Propósito son llamados (a ser santos). 29 Porque a los que antes conoció, también les señaló desde antes el camino para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el Primogénito entre muchos hermanos;

 

La vida es una especie de carrera de obstáculos, debemos llegar a la meta (transcurrir en este mundo) sorteando los diversos obstáculos (dificultades) que se nos presenten, a veces tropezaremos con ellos, otras los  esquivaremos, depende de cuan atenta este nuestra mirada en el camino, y cuan predispuesto este nuestro corazón para vencer y lograr el triunfo, porque tentaciones y dificultades habrá siempre en nuestra vida.

 

2ºCORINTIOS 1: 8 Porque hermanos, no queremos que ignoréis de nuestra tribulación que nos fue hecha en Asia; que sobremanera fuimos cargados sobre nuestras fuerzas de tal manera que estuviésemos en duda de la vida. 9 Más nosotros tuvimos en nosotros mismos respuesta de muerte, para que no confiemos en nosotros mismos, sino en Dios que levanta los muertos: 10 El cual nos libró y libra de tanta muerte; en el cual esperamos que aun nos librará;

 

Como enfrentar los problemas como Cristo:

 

1º Recuerda que el plan de DIOS es bueno

 

JEREMIAS 29: 11 Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dijo el SEÑOR, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.

 

GENESIS 50: 20 Vosotros pensasteis mal sobre mí, mas Dios lo pensó por bien, para hacer lo que vemos hoy, para dar vida a mucho pueblo.

 

ROMANOS 8: 18 Porque tengo por cierto que lo que en este tiempo se padece, no es de comparar con la gloria venidera que en nosotros ha de ser manifestada.

 

Pero porque las dificultades, y prefiero llamarlas dificultades y no problemas, porque los problemas traen consigo una solución y no todos estamos capacitados para resolverlo, siempre hablando desde lo humano, pero las dificultades, nos limitan o retrasan pero permiten que sigamos adelante; porque esta regla inherente (Que es necesario e inseparable de lo que está unido) de dificultades en la vida; se trata de superarse, sin ellas no lograríamos la transformación, tengamos en cuenta que nuestro corazón se cerró a DIOS y se transformo en carne, guardando los sentimientos y sensaciones como guía para transitar este mundo, pero nuestro padre quiere lo contrario, que abramos nuestro corazón para que no nos guiemos por nuestro propio discernimiento que solo nos permite superarnos por nuestro propio raciocinio, lo cual es temporal, quiere que nuestras acciones perduren con una mente abierta y altruista(“Diligencia en procurar el bien ajeno aun a costa del propio”), mirando mas allá de los problemas viendo las soluciones a largo plazo que nos permiten trascender y no lo inmediato que solo es un atajo en las dificultades pero no la solución a estas.

El raciocinio de la carne está en la mente. El raciocinio del espíritu esta en el corazón (alma) ahí está el cambio, cuando DIOS nos habla lo hace al corazón, este es el que escucha y memoriza las enseñanzas del padre allí es donde se modifica nuestra esencia.

 

2º Regocíjate y da gracias

 

Porque nos acercamos a DIOS o hablamos con él cuando mas heridos nos sentimos, porque nuestra intimidad con el padre forma lazos más fuertes en esos momentos,  que nos mueve a esta acción.

Recordemos cuando éramos niños y nos lastimábamos, a quien acudíamos o llamábamos inmediatamente, ¡a nuestros padres! Entonces pensemos que sensaciones nos abrazaban que nos movilizaba a esto.

Existe un lazo inquebrantable hacia nuestros padres, hacia aquellos que nos dieron la vida, existe ese algo que no se ve pero se siente, una fuerza poderosa que nos une, ese lazo a quien nos creo, nos protege, nos guía; es la confianza, a quien sabemos que no nos va a defraudar, que podemos contar incondicionalmente a pesar de nuestro comportamiento, sea bueno o malo este. Ese lazo es el que nos une a nuestro creador a un nivel espiritual, ya no de la carne como el ejemplo de nuestros padres, si a nuestra existencia, ya no como individuos sino como parte de su amor.

 

3º Niégate a darte por vencido

 

SANTIAGO 1: 2 Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, 3 sabiendo que la prueba de vuestra fe obra paciencia. 4 Y la paciencia consuma la obra, para que seáis perfectos y enteros, sin faltar en alguna cosa.

 

Lo importante es el cambio de actitud, ver la solución y no el problema, una cuestión de enfoque. No aferrarse a lo que fue o pudo haber sido, esta es una de las artimañas de LCF para que perdamos la orientación, alejando el presente de nuestra vida, y esfumando el futuro que queremos alcanzar.

 

En este camino de transformaciones no siempre las situaciones serán difíciles, algunas pasaran casi inadvertidas, otras dejaran marcas, lo importante es entender porque sucedieron, si uno solo se queja de su vida miserable, porque cree que es injustamente atacado, cree que no es parte del problema, ahí está justamente su problema; pero cuando a pesar de todo nos fortalecemos en Cristo y continuamos, con el tiempo descubrimos el porqué de nuestros sufrimientos , en ese punto maduramos espiritualmente y nos permite continuar, de otra manera no avanzamos y quedamos aferrados a viejos recuerdos de una vida que no volverá a ser jamás, no hay que olvidar nunca lo que pasamos para reconocer cuando DIOS nos transformo.

 

HEBREOS 10: 32 Pero traed a la memoria los días pasados en los cuales después de haber recibido la luz, sufristeis gran combate de aflicciones. 33 De una parte ciertamente con vituperios y tribulaciones fuisteis hechos espectáculo; y de otra parte hechos compañeros de los que estaban en tal estado. 34 Porque de mis prisiones también os resentisteis conmigo, y el robo de vuestros bienes padecisteis con gozo, conociendo que tenéis en vosotros una mejor sustancia en los cielos, y que permanece. 35 No perdáis pues esta vuestra confianza, que tiene grande remuneración de galardón; 36 porque la paciencia os es necesaria, para que, habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa. 37 Porque aún, un poquito, y el que ha de venir vendrá, y no tardará. 38 Mas el justo vivirá por la fe; más el que se retirare, no agradará a mi alma. 39 Pero nosotros no somos tales que nos retiremos para perdición, sino fieles para ganancia del alma. 

 

SANTIAGO 5: 7 Pues, hermanos, sed pacientes hasta la venida del Señor. Mirad que el labrador espera el precioso fruto de la tierra, esperando pacientemente, hasta que reciba la lluvia temprana y tardía. 8 Sed también vosotros pacientes, y confirmad vuestros corazones, porque la venida del Señor se acerca. 9 Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para que no seáis condenados. He aquí, el juez está delante de la puerta. 10 Hermanos míos, tomad por ejemplo de aflicción, y de paciencia, a los profetas que hablaron en nombre del Señor. 11 He aquí, tenemos por bienaventurados a los que sufren. Habéis oído la paciencia de Job, y habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso y piadoso.