SALMO 119: 73 Yod. Tus manos me hicieron y me formaron; Dame entendimiento para que aprenda Tus mandamientos.

 

SALMO 138: 8 El SEÑOR cumplirá Su propósito en mí; Eterna, oh SEÑOR, es Tu misericordia; No abandones las obras de Tus manos.

 

RECURSOS

 

TODOS NUESTROS RECURSOS PROVIENEN DE DIOS

 

En comunión aprendemos a identificar y diferenciar nuestros dones, talentos, y habilidades, el descubrimiento de estas, nos permite elegir el camino de nuestro propósito, siendo más eficientes en nuestro ministerio, no desperdiciando nuestra vida en banalidades que solo sirven al mundo carnal; y también nos pone en una comunicación constante con nuestro padre, porque sin esta comunicación no lograríamos entender que es lo que nos está comunicando y lo que desea para nosotros.

 

Estas habilidades que poseemos están destinadas para un propósito, descubrirlo es nuestra tarea, sabemos de antemano que es para servir a la iglesia de DIOS, pero no de qué forma, un ejemplo: en el mundo material, cobraríamos por utilizar estos talentos y destrezas para otros, y la pregunta es, DIOS quiere esto.

 

 

CADA RECURSO PUEDE USARSE PARA LA GLORIA DE DIOS

 

Una vez descubiertos nuestros talentos, donde lo aplicamos, el ser hábil en un trabajo determinado, no significa que, esa habilidad que DIOS nos dio sea nuestro propósito, en nuestros trabajos somos hábiles para desempeñar muchas tareas pero, no significa que es nuestro propósito, para el cesar lo que es del césar, y a DIOS lo que es de DIOS, tal vez coincidan nuestras habilidades y nuestro propósito, pero en el mundo nuestro servicio es remunerado para nuestra subsistencia, lo que no quita que hagamos trabajos para la iglesia de DIOS. Esto quiere decir, que si en nuestro trabajo ayudamos a un compañero a realizar su tarea, este acto de solidaridad, es lo que le importa a DIOS, y no la tarea que hacemos, estamos enseñando a otros, como DIOS quiere que nos comportemos para nuestras vidas, sus fundamentos. Pero también el trabajo que desempeñamos o la habilidad que tenemos sirven para ayudar a otros en la vida, fuera de nuestro trabajo, ámbito donde ejecutamos estas habilidades.

 

COLOCENCES 3: 23 Todo lo que hagan, háganlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres,

 

COLOCENCES 3: 24 sabiendo que del Señor recibirán la recompensa de la herencia. Es a Cristo el Señor a quien sirven.

 

EXODO 35: 30 Entonces Moisés dijo a los Israelitas: "Miren, el SEÑOR ha llamado por nombre a Bezalel, hijo de Uri, hijo de Hur, de la tribu de Judá. 31 "Y lo ha llenado del Espíritu de Dios en sabiduría, en inteligencia, en conocimiento y en toda clase de arte, 32 para elaborar diseños, para trabajar en oro, en plata y en bronce, 33 y en el labrado de piedras para engaste, y en el tallado de madera, y para trabajar en toda clase de obra ingeniosa. 34 "También le ha puesto en su corazón el don de enseñar, tanto a él como a Aholiab, hijo de Ahisamac, de la tribu de Dan. 35 "Los ha llenado de habilidad para hacer toda clase de obra de grabador, de diseñador y de bordador en tela azul, en púrpura y en escarlata y en lino fino, y de tejedor. Están capacitados para toda obra y creadores de diseños.

 

EXODO 36: 1"Bezalel, Aholiab y toda persona hábil en quien el SEÑOR ha puesto sabiduría e inteligencia para saber hacer toda la obra de construcción del santuario, harán todo conforme a lo que el SEÑOR ha ordenado." 2 Entonces Moisés llamó a Bezalel y a Aholiab y a toda persona hábil en quien el SEÑOR había puesto sabiduría, y a todo aquél cuyo corazón le impulsaba a venir a la obra para hacerla.

 

LO QUE SOY CAPAZ DE HACER, ES LO QUE DIOS QUIERE QUE HAGA

 

Cuando DIOS nos pide que demos para recibir, o que demos para que el nos pueda recompensar, nos está diciendo, que al dar de nosotros lo mejor, y lo bueno, inmediatamente sentimos ese gozo, de tarea bien cumplida, de satisfacción, de haber servido para algo en este mundo, cumpliendo con los fundamentos de nuestro padre, que nos engrandecerá en espíritu para estar aprobados en el día final de nuestras vidas, para la presencia de nuestro salvador, esa es la retribución con la que somos recompensados, por este motivo en las sagradas escrituras se nos exhorta a comprender bien la palabra de DIOS, el que quiera oír, que oiga, el que lea que entienda, pedimos y no pedimos bien, uno piensa que la recompensa en este mundo va a ser de forma material, damos para que en un futuro no muy distante, recibamos multiplicados nuestros sacrificios y esfuerzos, pero no es correcta esta deducción, DIOS constantemente nos está diciendo que muramos a la vida material y carnal, y no lo escuchamos, no vamos a recibir ninguna recompensa monetaria de parte de DIOS, el solo trata las cosas espirituales, que son las únicas que nos van a preparar para nuestra vida eterna, el único equipaje que podemos llevar cuando partamos de este mundo, estamos formando un ser espiritual en nuestro interior, lo espiritual es semejante a lo espiritual, y lo carnal a lo carnal. DIOS trabaja en las cosas que no se ven, las que se ven son del mundo.

Lo que no quita que si obramos correctamente, DIOS va a poner en nuestro camino personas que nos ayuden a alcanzar metas que satisfagan nuestra vida en este mundo, personas que también están en el buen camino de DIOS.

 

Explotar nuestros recursos significa, que lo hagamos para que la ayuda a la iglesia sea en el espíritu, significa que aunque hagamos cosas materiales, porque es el medio en que vivimos y pertenecemos, el fin sea para reconfortar el espíritu de aquellos que ayudemos. Fortaleciendo el espíritu, en sus necesidades, debilidades, y aflicciones, en esto se beneficia la carne.

 

2° CORINTIOS 1: 3 Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, 4 el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que también nosotros podamos consolar a los que están en cualquier aflicción, dándoles el consuelo con que nosotros mismos somos consolados por Dios.

 

Todos somos diferentes, somos únicos, e irremplazables, esto permite que la vida sea un misterio que vamos descubriendo a medida que nos relacionamos, y transitamos por este mundo. Ese motivo, es el principal por el cual la existencia misma tiene matices diferentes que la hacen atractiva y nada monótona, que merece vivirla.

 

 

MI PERSONALIDAD CUENTA

 

Somos un rompecabezas, que, aunque distintos, encajamos a la perfección unos con otros, nuestras personalidades y destrezas, dones espirituales, y habilidades, permiten, el equilibrio que nos mantienen dependientes, unos de otros.

 

ANTECEDENTES

 

Familiares: que aprendiste al crecer en familia.

 

Educacionales: cuál fue la materia favorita en la escuela.

 

Vocacionales: en cual trabajo has sido más eficiente, y has disfrutado más.

 

Espirituales: cuál ha sido el momento más importante con DIOS.

 

Ministerio: cuanto has servido a DIOS en el pasado.

 

Dolorosas: que es has aprendido de los problemas y pruebas.